Probando el Satisfayer

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En mi grupo de amigas somos 5 personas, todas mujeres y a todas nos gusta descubrir nuestra sexualidad. El año pasado decidimos que nos íbamos a regalar juguetes sexuales por nuestros cumpleaños y el primero que llegó fue el mío.

Ese día me levanté con el móvil lleno de mensajes de mucha gente felicitándome por mi cumpleaños y sobre todo del grupo de mis amigas que habían organizado una cena para celebrar mi cumpleaños. Pasé el día nerviosa por la cena, celebrando en familia, contestando mensajes y llamadas de gente, etc.

Cuando llegó la tarde me duche, me vestí y me maquillé para la cena con mis amigas y cuando dieron las 20, quedé con ellas en el bar en el que quedamos siempre. Pasamos un par de horas tomando algo y demás y me hicieron pasar vergüenza cantándome el cumpleaños feliz en frente de todo el bar. Después de eso nos fuimos a casa de una de mis amigas ya que la cena iba a ser allí.

Una vez llegamos a su casa me quedé alucinando con la mesa que había preparado, ¡estaba todo precioso! Nos sentamos todas en la mesa y cenamos entre risas y recordando momentos de fiesta y de chicos. Y entonces llegó el momento del regalo. Me dieron una bolsa con una caja en su interior y la saqué. Al abrir el envoltorio de la caja vi que era un satisfayer y todas comenzamos a reírnos y prometí que contaría cómo funcionaba.

Horas después y después de habernos tomado algunas copas algunas de ellas empezaron a decir que querían ver el Satisfayer en funcionamiento, que querían saber cómo funcionaba y una de ellas me propuso que lo usara delante de ellas. Dudé durante unos segundos pero las copas que llevaba me hicieron responder que sí.

Asique les pedí que se sentaran delante del sofá en el suelo y yo me quité el vestido que llevaba quedándome únicamente en ropa interior delante de ellas, me senté en el sofá y abrí las piernas dejando que tuvieran una buena vista. Entonces saqué el satisfayer de su caja y le di al botón de encender y comencé a pasarlo por mi cuerpo calentándome y viendo como ellas me miraban. Comencé a bajarlo hacia mi coño y a ponerlo sobre él pero enseguida me di cuenta que el tanga que llevaba me estorbaba.

Entonces una de mis amigas se acercó a mi y me quitó el tanga dándole un beso a mi coño, yo no pude evitar sonreír al notarlo y cuando volvió a sentarse puse el satisfacer directamente en mi clítoris a la velocidad mínima. Fui sintiendo como me mojaba cada vez más a medida que subía la intensidad del satisfayer y poco a poco me iba olvidando de que estaban mis amigas mirándome.

Segui subiendo la intensidad a medida que gemía y jadeaba y me apretaba las tetas con la otra mano. Mientras me olvidaba del resto y sentía que estaba sola en la cama de mi habitación, seguí sintiendo las vibraciones del satisfayer en mi clítoris con mayor intensidad y no podía evitar gemir de placer y morderme el labio. Cerré los ojos sintiendo como mi coño se empapaba y solo me pedía que subiera más la intensidad, y así lo hice.

Estuve durante un rato más sintiendo la succión en el clítoris hasta que me corrí como nunca me había corrido, tanto que me empezaron a temblar las piernas. Una vez me relaje un poco y abrí los ojos me di cuenta que no estaba en mi casa, y entonces vi a mis amigas todas desnudas masturbando sus coños viendo como yo me había corrido con su regalo.

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